Palabra:
Filipenses 4, 4-7:
Filipenses 4, 4-7:
4 Alégrense siempre en el Señor. Vuelvo a insistir, alégrense. 5 Que la bondad de ustedes sea conocida por todos los hombres. El Señor está cerca. 6 No se angustien por nada, y en cualquier circunstancia, recurran a la oración y a la súplica, acompañadas de acción de gracias, para presentar sus peticiones a Dios. 7 Entonces la paz de Dios, que supera todo lo que podemos pensar, tomará bajo su cuidado los corazones y los pensamientos de ustedes en Cristo Jesús.
Profecía:
- Estoy con los brazos abiertos esperando que vengais a Mí, necesitais acercaros a mi regazo para ser consolados, para que esteis alegres, para pedirme todo aquello que necesiteis. (Esta profecia fue confirmada por otras dos hermanas.)
- Hoy es un día Nuevo, tenemos que dar gracias al Señor, no puede ser un día mas, hoy es el día que el Señor nos regala.
ElSeñor nos dá su Luz por muchos caminos, pero nosotros en nuestra libertad decidimos, ver, seguirle, hacer ó nó, gracias por que TÚ eres mi único consuelo que no me ridiculiza por lo que siento y hago que creo que tu me pides y en mi libertad quiero hacer,y ser tu testigo.
ResponderEliminarSeñor dame lo que tu sabes que necesito para seguir soportando a la gente, y tocando por tu gracia esos corazones aunque yo no lo vea.